Hoy, 18 de febrero, en la sede de la Cámara de Industria, Comercio y Servicios de Cochabamba (ICAM), se llevó a cabo la REUNIÓN DE EMERGENCIA DE COORDINACIÓN DE ACCIONES DE LUCHA CONTRA EL CONTRABANDO a cuya finalización, se emitió el siguiente Pronunciamiento denominado “Unidos Contra el Contrabando”:

• El contrabando no solo es un delito, sino que también se constituye en el mayor enemigo de la economía. Bolivia pierde aproximadamente $us. 3.500 millones al año (monto equivalente al PIB de Chuquisaca, Oruro y Pando juntos) a causa de esta ilícita actividad. En términos de generación de empleo formal, las pérdidas ocasionadas por el contrabando equivalen a 580.000 fuentes de trabajo. En Cochabamba, se estima que el contrabando genera una pérdida de $us. 600 millones anuales, los cuales equivalen a 100.000 fuentes de empleo.

• Si bien esta ilegal actividad ha estado siempre presente en nuestro medio, en los últimos tiempos ha alcanzado niveles desmesurados y preocupantes. Hoy, alarmantemente, el contrabando se ha normalizado… se practica abiertamente… con descaro… al punto de comercializarse productos de contrabando a través redes sociales, deliverys y hasta en “Ferias Públicas”; todo a la vista y paciencia de propios y extraños.

• Entendemos que la falta de empleo formal ha empujado a muchos bolivianos a dedicarse a esta ilícita actividad y que la crisis económica induce a la población a consumir bienes de contrabando; pero hacemos un ferviente llamado a la reflexión sobre las nefastas consecuencias que se avecinan de continuar esta perniciosa dinámica.

• Cada centavo que se paga por un producto de contrabando es dinero que sale del país… representa fuga de divisas, evasión fiscal, el cierre de empresas y, peor aún, la destrucción de más empleos formales, constituyendo así, un círculo vicioso que terminará arrasando la ya golpeada economía formal… esa que con sus impuestos y aportes a la seguridad social solventa la educación fiscal, la salud pública, la jubilación y la inversión de los distintos niveles de gobierno; en otras palabras, esa economía formal que sostiene al país.

• Es inconcebible que la legislación vigente haga casi imposible procesar a los contrabandistas. El artículo 181 del Código Tributario Boliviano ha sufrido cinco modificaciones desde su promulgación en 2003. Inicialmente, establecía que, para que el contrabando sea considerado como un delito, el valor del tributo omitido debía superar las 10 mil UFV’s (en ese entonces, aproximadamente $us. 13.370). Sin embargo, en la actualidad, este valor se ha incrementado en un 1.900%, puesto que el tributo omitido de las mercaderías de contrabando debe ascender a 200 mil UFV’s ($us. 68.000), para ser considerado delito, siendo el monto más alto de todo el continente.

• Ejemplificando lo anterior, en 2003 había riesgo de ser procesado penalmente por contrabandear 107 televisores, por un monto de $us. 107 mil. En la actualidad, un contrabandista tiene riesgo de ser imputado al internar 540 televisores por un valor que supera el medio millón de dólares; monto que solo verdaderas mafias organizadas son capaces de financiar.

• Por tanto ¡urge una modificación a esta normativa cómplice de lo ilícito! ¡Urge también la coordinación y efectiva intervención de las instituciones públicas encargadas de combatir este delito!

• Es por eso que hoy, la ICAM, ha convocado de emergencia a las Autoridades públicas cochabambinas involucradas en esta delicada temática: Aduana Nacional, Servicio de Impuestos Nacionales, SENASAG, Gobiernos Autónomos Departamental y Municipal, Intendencia, Defensa al Consumidor.

• También hemos convocado a las organizaciones que representan a los empresarios, emprendedores y trabajadores, quienes son los directos afectados por el contrabando: Central Obrera Departamental, Cámara Agropecuaria, Federación de Trabajadores Fabriles, Federación de Profesionales.

• Hemos realizado esta convocatoria convencidos de que, solo a través del esfuerzo coordinado entre estas instituciones públicas y privadas, se puede luchar efectivamente contra el virus del contrabando…

• Hace 21 años, nuestra institución creó el sello “Hecho en Bolivia”, precisamente en defensa de la producción y de la mano de obra nacional. Esta campaña es, sin duda alguna, la más exitosa y duradera del país y nuestro verdadero “escudo” contra el contrabando.

Por lo manifestado, las instituciones públicas involucradas, el sector empresarial cochabambino, los trabajadores; reafirman hoy su firme compromiso de luchar frontal, coordinada y permanentemente contra el contrabando; exhortando a toda la población a tomar conciencia sobre la importancia de consumir la producción nacional, apoyar la formalidad y generar fuentes de empleo para los bolivianos.